TIPOS DE PREVENCIÓN DEL CÁNCER
Seguro que conocéis a alguna persona que tiene o ha tenido cáncer. No es raro: se calcula que una de cada cinco personas desarrolla cáncer a lo largo de su vida. No obstante, una parte de los casos se pueden prevenir.
En esta entrada os explicaremos los diferentes niveles de prevención que existen.
Para entender lo que es la prevención, antes tenemos que hablar de la historia natural de la enfermedad o cómo progresan las enfermedades a lo largo del tiempo.
“Entender la historia natural de cada tipo de cáncer es fundamental para saber qué medidas de prevención se pueden aplicar en cada etapa de la evolución de la enfermedad y así evitar su progresión.”
PREVENCIÓN PRIMARIA
El proceso de la enfermedad comienza con la exposición a factores de riesgo o causantes de enfermedad en una persona susceptible a enfermar.
La prevención primaria se centra en proteger a las personas sanas de la aparición de la enfermedad mediante intervenciones de promoción y protección de la salud. Por lo tanto, las estrategias de prevención primaria están destinadas a la población general. Tienen como objetivo reducir la aparición de enfermedades. ¿Cómo? Eliminando la exposición a factores de riesgo o aumentando nuestra resistencia frente a ellos.
En este vídeo verás un ejemplo claro de prevención primaria:
Existen unos cuantos consejos que puedes hacer en tu día a día, y que pueden ayudar a prevenir 4 de cada 10 casos de cáncer. La mayoría de estos consejos se relacionan con medidas de prevención primaria. Algunos ejemplos son:
- Seguir una alimentación sana y variada
- Practicar ejercicio físico
- Vacunarnos y vacunar a nuestros hijos
- Protegernos del sol
- Evitar el tabaco y el alcohol.
PREVENCIÓN SECUNDARIA
Cuando el proceso de la enfermedad comienza, aparecen cambios patológicos que no producen síntomas, y por lo tanto, el individuo no se da cuenta de ellos. Esto se conoce como etapa subclínica de la enfermedad o período de latencia.
En esta etapa se realizan las actividades de prevención secundaria, también llamadas de detección precoz o de cribado.
“Estas actividades consisten en buscar activamente la enfermedad en una población asintomática.”
Para ello, a determinados grupos de población se les aplican pruebas seguras, fáciles de usar y económicamente asequibles, que permiten un diagnóstico temprano de la enfermedad. La prevención secundaria tiene como objetivo identificar la existencia de problemas en sus fases iniciales para así aumentar la efectividad del tratamiento y así mejorar el pronóstico y la calidad de vida de los afectados por la enfermedad.
Sin embargo, no todos los tipos de cáncer pueden detectarse. Entre los que sí pueden detectarse tenemos el cáncer de mama, el de cuello uterino o el de colon. Estos se pueden diagnosticar en esta fase inicial mediante técnicas como la mamografía, la citología, el test de VPH o la prueba de detección de sangre oculta en heces.
En este vídeo verás un ejemplo de prevención secundaria:
PREVENCIÓN TERCIARIA
En algún momento, la enfermedad comienza a producir signos y síntomas que permiten sospechar su presencia y que llevan a los individuos a buscar asistencia médica.
La prevención terciaria tiene como objetivo disminuir el impacto de una enfermedad que ya está ocurriendo, e incluye actividades de tratamiento y rehabilitación. Estas actividades pretenden curar la enfermedad o enlentecer su progresión. Con ello se pretende reducir la aparición o agravamiento de complicaciones e invalideces, e intentar mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Un ejemplo de prevención terciaria es también reducir el malestar emocional excesivo tras el diagnóstico de cáncer.
Como decíamos en una entrada previa del blog: “Estar sanos y vivir sin enfermedad es un privilegio. Por eso, prevenir el cáncer nos preocupa a todos”.
Unidad de Infecciones y Cáncer
IDIBELL
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